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Para satisfacer las necesidades energéticas de la sociedad moderna, es imprescindible seguir invirtiendo tiempo y recursos en la búsqueda de soluciones sostenibles. Las energías renovables son una solución fundamental en el camino hacia un futuro más sostenible y limpio para todos.

En el artículo de hoy, queremos explicarte cuál es el impacto ambiental de las placas solares. Podremos evaluar su huella de carbono y ver cuáles son las prácticas medioambientales que la respaldan.

¿Qué es la huella de carbono renovable?

La huella de carbono renovable es una medida que usamos para medir las emisiones de gases de efecto invernadero relacionadas a la producción y uso de energías renovables. No es una métrica exclusiva para la energía solar o fotovoltaica, sino que también se usa para medir el impacto de la energía eólica, hidráulica y otras.

Es una herramienta que nos permite evaluar el impacto ambiental de las fuentes de energía que usan fuentes y recursos naturales y sostenibles, y no combustibles fósiles.

En concreto, la huella de carbono renovable determina cuánto CO2 y otros gases de efecto invernadero se liberan en la atmósfera durante el ciclo de vida de una fuente de energía renovable. Es decir, desde la extracción de materias primas hasta la disposición de componentes al final de su vida útil.

Huella de Carbono Renovable y Sostenibilidad Energía Solar

La huella de carbono renovable es un indicador crucial para evaluar el impacto ambiental de cualquier forma de energía. Las placas solares destacan como una fuente de energía con una huella de carbono muy baja si la comparamos con los combustibles fósiles.

Además, teniendo en cuenta que la luz solar es una fuente totalmente renovable y abundante, esto nos permite garantizar un suministro constante sin agotar los recursos naturales. Las placas solares son sostenibles energéticamente porque son capaces de generar energía de una forma limpia y continua. Esto nos ayuda a reducir la dependencia de combustibles no renovables, fomentando un entorno más limpio y saludable.

¿Cómo contribuyen las placas solares al desarrollo sostenible?

La contribución ambiental de las placas solares va mucho más allá de la reducción de emisiones de carbono. Adoptar la energía solar como fuente de energía promueve el desarrollo sostenible de múltiples formas. Para empezar, una placa solar no requiere de combustibles fósiles para su funcionamiento, por lo que ayuda a preservar los recursos naturales. Además, esto permite reducir y evitar la contaminación de agua, aire y suelo que puede asociarse a la extracción y quema de combustibles para la obtención de energías no renovables (como el petróleo, el gas natural o el carbón, que son las tres fuentes principales de energía obtenidas de los combustibles fósiles y las más utilizadas a nivel mundial).

Las empresas dedicadas a la energía solar están comprometidas con prácticas responsables que minimizan el impacto en el medio ambiente. Y es que las prácticas relativas a la instalación y mantenimiento de placas solares y sistemas de autoconsumo solar también son cruciales en la promoción de un entorno más limpio.

Desarrollo sostenible en el sector fotovoltaico

Hay un tema muy importante en la industria de la energía solar y que está en constante evolución, y es la sostenibilidad de los materiales utilizados en la fabricación de las placas solares. La demanda de energía solar es cada vez mayor y con ella también crece la necesidad de asegurar que los materiales que se utilizan son lo más sostenibles posible.

En la fabricación de paneles solares se pueden usar distintos materiales. para extraer silicio, que es el material más común, se necesita mucha energía y recursos – aunque lo cierto es que hay muchas empresas trabajando en técnicas más eficientes y sostenibles para producir silicio.

El cadmio teluro (CdTe) y el Cobre Indio Galio Selenio (CIGS) son otros materiales que se usan especialmente para las placas de capa delgada. Son metales tóxicos (el CIGS no lo es tanto) y precisamente por eso también se está invirtiendo en buscar nuevos métodos de extracción.

En líneas generales, la industria de la energía solar sigue trabajando para mejorar la sostenibilidad de los materiales necesarios para las placas fotovoltaicas y sistemas de autoconsumo solar. Y esta mejora continua no sólo está enfocada a la producción, sino también al reciclaje de los materiales. Las normativas y estándares también evolucionan con el fin de promover siempre las prácticas más sostenibles en la cadena de suministro de energía solar.

El impacto verde de las placas solares

La energía solar es una fuente limpia y renovable que no compromete el bienestar de nuestro planeta para las generaciones futuras. Nos permite preservar los recursos naturales y mejorar las condiciones de vida de las generaciones actuales y futuras.

Más allá de eso, las energías renovables como la solar también tienen un impacto muy positivo en las comunidades locales. Permite crear empleos verdes, promueve la inversión en infraestructuras sostenibles y fomenta la educación ambiental a todos los niveles. Y lo mejor es que estas son solo algunas de las formas en las que empresas solares como ESR contribuimos al desarrollo sostenible a nivel local y global.

ESR: Líderes en sostenibilidad y energía solar

En ESR nos enorgullece estar liderando el camino hacia un futuro mucho más sostenible a través de nuestras instalaciones de autoconsumo solar. Estamos comprometidos con el desarrollo e implementación de tecnologías lo más innovadoras posibles no sólo para reducir nuestra huella de carbono sino también el desarrollo sostenible en todas las comunidades en las que operamos.

Si quieres saber más sobre qué tipos de paneles solares existen, conocer las diferencias e informarte debidamente antes de invertir en tu sistema de autoconsumo, te recomendamos que sigas leyendo.

Conclusión

En conclusión, las placas solares y la energía fotovoltaica son fundamentales para un futuro sostenible. La huella de carbono renovable nos dice mucho sobre el impacto ambiental de los sistemas de autoconsumo solar y tenemos la certeza de que las placas solares son líderes en bajas emisiones. Son sostenibles, permitiendo generar energía limpia sin agotar los recursos naturales. Esto no solo reduce la dependencia de los combustibles fósiles, sino que también nos ayuda a preservar el medio ambiente. Además, las placas solares promueven prácticas mucho más responsables y limpias en toda la industria.